Aunque pareciera que se vivió una pesadilla, no fue así, el Deportivo Cali tuvo una de las peores noches en su historia. El perder un título de la forma como se perdió, el quedarse sin argumentos para defender la buena campaña realizada hasta ayer y todo lo que se dio tras la dura derrota ante Nacional es algo difícil de digerir.

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Encontrar las razones para esta debacle deportiva es complicadísimo, aun así debemos hacer el ejercicio lógico y descubrir los errores que se cometieron en la final.

La falta de actitud

El ambiente del Atanasio supero y mucho a varios jugadores del Deportivo Cali, su espíritu de lucha y el estar lejos de los suyos lleno de inseguridad a los verdiblancos. Sin embargo, esto se conocía desde el inicio y los jugadores debieron y quedaron debiendo un poco de actitud, no la hubo para levantar a un equipo que se caía en medio de la adversidad.

El carácter, el temple y la fuerza que se mostró en Palmaseca, nunca apareció en el Atanasio. Por el contrario, se vio un equipo sin respuesta y sin agallas para superar el ambiente hostil que le impuso Nacional.

La falta de tenencia del balón

El Deportivo Cali desde los primeros minutos resigno la tenencia del balón, entregándosela a Nacional, de quien se conocía que con la pelota en los pies era capaz de todo.

El partido tuvo una variante importante, que fue la inclusión de Uribe en el medio, quien junto a Macnelly destrozaron defensivamente al Deportivo Cali. Obviamente, encontramos allí el primer error del partido. Desde el banco, se perdió el norte y se actuó con el ambiente de superioridad que nunca debimos tener.

Aunque coincidíamos con el entrenador que lo peor que podría hacer el Cali era irse a defender en el Atanasio, equivocamos al creer que mantener el mismo esquema que se tuvo en Palmaseca nos daría la victoria y no fue así.

El partido tenía otra exigencia y el Cali se quedó sin respuesta, ya que, se eligió el planteamiento contrario a lo que el partido exigía.

Los errores individuales se pagaron muy caros

Otro punto que reviste análisis es el de los errores individuales, uno a uno los jugadores de Nacional avasallaron a los del Deportivo Cali. Por las bandas, por el medio, por donde transitaba un jugador verdolaga no había la respuesta de los jugadores verdiblancos.

Nacional saco mucho rédito de su trabajo por la banda derecha del Cali, Ibargüen hizo trizas a su marca, un indefenso Castrillón y a partir de allí comenzó su remontada, en la primera jugada que tuvo se originó el tanto de Macnelly.

En el medio, fueron inapelables las libertades en marca que tuvo Nacional. Torres y Uribe, actuaron con libertad y manejaron a su antojo el partido.

Por la izquierda, entre Bocanegra y Rodin Quiñonez, se las arreglaron para hacer ver insuficientes los esfuerzos defensivos Jeison Angulo.

No era suficiente con lo que se hizo en Palmaseca, ni éramos superiores a Nacional por lo realizado en casa, nos comimos el cuento y el verdadero Nacional castigó con rudeza la fragilidad e inocencia del plantel azucarero.

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Sobre el autor
Mario Meza May
Abogado. Dedicado a mi profesión y especialista en Fútbol y Tenis.